Más de uno, hoy ya mayor, cruzó en su momento la frontera (bien por Hendaya,bien vía Andorra) para abastecerse de estas "joyas" que la dictadura franquista,con su moralismo fundamentalista,prohibía en España.
Luego de acabada la segunda guerra mundial, Francia recuperó su larga tradición editorial en publicaciones e iconografía erótica. Pero ya no fue como fuera en otros tiempos. Alguna que otra publicación conservó el aire art-nouveau (tan clásico en el erotismo de ese país), pero sólo en la tipografía del logo de la publicación ("Hello! Paris", es un ejemplo).Alguna otra,retomó en su título, el añorado resplandor del can-can.Pero no mucho más. La influencia americana , tanto en la estética como el tratamiento de la imagen de las modelos, era ya un hecho irreversible. De ésto no se salvó ni siquiera el mítico Paris_Hollywood (su nombre lo dice todo en este particular).
Luego de acabada la segunda guerra mundial, Francia recuperó su larga tradición editorial en publicaciones e iconografía erótica. Pero ya no fue como fuera en otros tiempos. Alguna que otra publicación conservó el aire art-nouveau (tan clásico en el erotismo de ese país), pero sólo en la tipografía del logo de la publicación ("Hello! Paris", es un ejemplo).Alguna otra,retomó en su título, el añorado resplandor del can-can.Pero no mucho más. La influencia americana , tanto en la estética como el tratamiento de la imagen de las modelos, era ya un hecho irreversible. De ésto no se salvó ni siquiera el mítico Paris_Hollywood (su nombre lo dice todo en este particular).
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