Una foto,como tantas otras, hallada en la red.Difícil es saber si se trata o no de una manipulación con el Phososhop.En cualquier caso, la imagen del fotógrafo (convertido en sombra), es la de un voyeur.Fotógrafo y modelo quedan,así,vinculados.Digamos que es un relato que narra la historia de una irresistible atracción (visual,claro está).
Es ésta,obviamente,una foto de un aficionado,tomada hacia los 50s. Sería una foto vulgar - por redundante- si no fuese porque la chica, que exhibe el cartel en cuestión, tuviera algún atributo sexy. Pero la retratada ostenta una imagen neutra,por entero alejada de todo glamour o atractivo sexual. Tal incoherencia es lo que, por lo menos a mi juicio, otorga a la foto interés y encanto. Es difícil saber si fue o no fue realizadada con la intención de poner de relieve esta paradoja visual.En cualquier caso, lo que importa es que ésta ha sido claramente lograda.
Una segunda observación: el declinante sol de la tarde -suavemente angulado- sirvió para iluminar adecuadamente a la retratada.Pero pasó factura: proyectó la sombra del fotógrafo, que aparece rendido a los pies de la chica. Involunta e indirectamente, el fotógrafo "entró" en la foto y devino en protagonista , sin duda importante, de la misma. De ser un retrato insulso y dominguero, la foto pasó a ser la historia de dos enamorados...
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